El trastorno esquizoide de la personalidad (TEP) está englobado dentro del grupo A de los trastornos de la personalidad. Se trata de un trastorno muy desconocido. Los individuos que lo padecen se caracterizan por la falta de interés en relacionarse socialmente y por una restricción de la expresión emocional. Puede aparecer durante la infancia o la adolescencia, aunque se suele diagnosticar en la edad adulta. Su prevalencia se estima en menos del 1% de la población. Es distinto de la esquizofrenia, aunque tienen puntos en común.
La personalidad previa que precede a este trastorno se caracteriza por personas que no necesitan a nadie, salvo a sí mismos, no sienten necesidad de agradar o impresionar a los demás y apenas sienten emociones.
Los criterios DSM IV para el trastorno esquizoide de la personalidad son:
A. Un patrón general de distanciamiento de las relaciones sociales y de restricción de la expresión emocional en el plano interpersonal, que comienza al principio de la edad adulta y se da en diversos contextos, como lo indican cuatro (o más) de los siguientes puntos:
- Ni desea ni disfruta de las relaciones personales, incluido el formar parte de una familia
- Escoge casi siempre actividades solitarias
- Tiene escaso o ningún interés en tener experiencias sexuales con otra persona
- Disfruta con pocas o ninguna actividad
- No tiene amigos íntimos o personas de confianza, aparte de los familiares de primer grado
- Se muestra indiferente a los halagos o las críticas de los demás
- Muestra frialdad emocional, distanciamiento o aplanamiento de la afectividad
De acuerdo con Gunderson los individuos con trastorno esquizoide de la personalidad se encuentran perdidos sin las personas que normalmente se encuentra a su alrededor porque necesitan de una sensación de seguridad y estabilidad. Sin embargo, cuando el espacio personal vital es invadido, se encuentran ahogados y sienten la necesidad de liberarse y ser independientes. Las personas con personalidad esquizoide son más felices cuando se encuentran en relaciones en las que el compañero demanda pocas exigencias emocionales o íntimas.
El trastorno esquizoide de la personalidad comparte varios aspectos con la depresión, el trastorno de personalidad por evitación y el Síndrome de Asperger, y puede resultar difícil distinguirlos entre sí. Sin embargo, existen características diferenciadoras importantes:
- Mientras que las personas con trastorno esquizoide pueden sufrir depresión, éste no siempre es el caso. Contrariamente a las personas con depresión, las esquizoides no suelen considerarse inferiores a los demás, aunque seguramente reconocerían ser diferentes.
- Contrariamente al trastorno de personalidad por evitación, la persona no sufre por no tener amigos o relaciones sociales, simplemente elige estar solo.
- Contrariamente al síndrome de Asperger, el trastorno esquizoide de la personalidad no implica ningún impedimento en la comunicación no verbal (ej. falta de contacto visual o entonación inusual) o patrones de intereses restringidos o comportamientos repetitivos (ej. adherencia estricta a rutinas o rituales, intereses inusualmente intensos en un único tema). Por el contrario, las personas con personalidad esquizoide son típicamente más indiferentes respecto a sus actividades. El trastorno esquizoide de la personalidad no afecta la capacidad de expresarse o comunicarse eficazmente con otros, y no se considera relacionado con ningún tipo de autismo.
Referencias bibliograficas
American Psychiatric Association (1994). Diagnostic and statistical manual of mental disorders (DSM-IV). Whashington: APA
Otras fuentes
Wikipedia: https://es.wikipedia.org/wiki/Trastorno_esquizoide_de_la_personalidad